Volver a estudiar a los 40

¿Hay una edad para ponerse a estudiar? Cuando llegan los 40, muchas personas se replantean su vida profesional. Son muchos los que entre sus opciones barajan estudiar para promocionarse o, por qué no, dar un giro radical a su trayectoria laboral. Y es que estudiar a los 40 puede convertirse en la mejor opción para tomar las riendas de nuestra vida.

Si te encuentras en este punto, ¡sigue leyendo este post! Primero, porque nunca es tarde para aprender y, segundo, porque la Formación Profesional es una muy buena opción para retomar los estudios después de un largo período de tiempo.

¿Preparado para un nuevo reto profesional? Déjate de excusas y da un paso al frente. Las ventajas de volver a estudiar a los 40 pueden ser muchas, y hemos venido a contártelas.

¿Cómo volver a estudiar a los 40?

Antes de ponerte manos a la obra, si ya has decidido volver a estudiar a los 40, la recomendación es tener un plan. ¿El motivo? Para que te organices de tal forma que puedas obtener los mejores resultados. De ahí que algunos consejos que debes aplicarte antes son los siguientes.

Identifica tus intereses y objetivos

Cuando te planteas qué quieres estudiar de nuevo, debes encontrar algo que realmente te motive. De ahí que es necesario que te hagas preguntas como: ¿qué te gustaría aprender? ¿Qué habilidades deseas adquirir o mejorar? ¿Estás buscando un cambio profesional? ¿O quieres alcanzar mejores condiciones laborales?

Una vez hayas obtenido una repuesta, podrás ir en la dirección correcta. Lo importante es definir tu objetivo para saber dónde centrar tus esfuerzos.

Investiga tus opciones

Hoy en día, si te planteas estudiar a los 40, hay una gran variedad de opciones disponibles. Una de ellas puede ser estudiar una FP, ya sea en modalidad online o presencial. De hecho, la modalidad a distancia te permitirá poder combinar tu vida académica con la familiar y la profesional.

Antes de nada, dedica tiempo a investigar las diferentes opciones. Sin duda alguna, seguro que encontrarás formación a tu medida. Una vez realizado este trabajo de campo, quédate con aquella que se adapte mejor a tus necesidades y metas.

Planifica tu tiempo

Aunque lo veas como una misión imposible, seguro que puedes organizarte. Encontrar el equilibrio entre el estudio y tus otras responsabilidades, como el trabajo y la familia, requiere principalmente que acomodes tu tiempo de estudio a tu estilo de vida.

La clave está en hacer cada día un hueco de al menos un par de horas. Ya sea a primera hora de la mañana, entre descansos o por la noche, cuando ya todo el mundo esté durmiendo. El caso es que encuentres en tu agenda un momento para dedicárselo plenamente a tu objetivo.

Prepárate mentalmente

Sin duda alguna, estudiar a los 40 es todo un desafío, ¡pero no una misión imposible! Además, es la oportunidad perfecta para no volver a cometer los errores del pasado.

Primordialmente, es aprender nuevas formas de estudiar, por ejemplo, a través de la formación a distancia. Es decir, adaptarte a un ambiente de aprendizaje muy diferente al que estabas acostumbrado cuando eras más joven.

Por el contrario, a tu favor recuerda que ya has sumado muchos años de experiencia y sabiduría, herramientas que te vendrán como anillo al dedo para aplicar durante este proceso de volver a estudiar a los 40.

¿Qué puedo estudiar a partir de los 40?

Hay una gran variedad de estudios disponibles si eres una de estas personas que ha optado por volver a estudiar a los 40. Y una opción que ofrece un amplio abanico de oportunidades es la Formación Profesional.

Cuando optas por estudiar una FP, no se trata simplemente de que te apliques conocimientos teóricos, sino también prácticos. Ante todo tienes que concienciarte de que la edad no es más que un número y, a partir de ahí, centrarte en forjar tu nuevo camino.

Nunca es demasiado tarde cuando se trata de apostar por un nuevo sector profesional, por mejorar tu empleabilidad o tus condiciones salariales. Sea como sea, aprovecha para apostar en algo que realmente te guste.

Ventajas de volver a estudiar a los 40

De acuerdo, puede ser que el volver a estudiar a los 40 no sea un camino de rosas. Exige sacrificios, sobre todo de tu tiempo libre, pero también te puede reportar una serie de beneficios como serían los que te contamos a continuación.

Encontrar un trabajo diferente y mejor

Seguro que a lo largo de tu carrera profesional te has plateado cientos de veces, que ese no era tu lugar. Puede deberse a varios motivos: aspirar a mejorar laboralmente, agotamiento del puesto actual, imposibilidad de crecer dentro de la empresa o, simplemente, porque el sector al que te dedicas no tenga buenas perspectivas laborales.

Hay que añadir que el mercado laboral ha variado mucho en los últimos años y, una profesión que no existía antes, ahora puede haberse convertido en tu nueva vocación. De ahí que necesites formarte en ello específicamente y, aunque te parezca un paso atrás, recuerda siempre que tu experiencia y madurez laboral son una enorme baza a tu favor.

Descubrir tu verdadera vocación

Cuando nos enfrentamos a qué estudiar la primera vez, quizás somos demasiado jóvenes para tomar una decisión tan importante de cara a nuestro futuro profesional y, de ahí, que realmente no nos dediquemos a lo que nos gusta o a lo que se nos da bien.

Pero ojo, como dice el refrán, “nunca es tarde si la dicha es buena”. Y estudiar a los 40 puede ser una buena oportunidad para identificar qué es lo que nos motiva, sacar el máximo partido a nuestras habilidades y, en definitiva, dedicarnos a lo que queremos.

No sigas siendo esclavo de una decisión que tomaste hace más de 20 años, cuando todavía no estabas seguro de lo que querías. Ahora es el momento de encontrar tu verdadera vocación.

Conciliar la vida laboral y familiar

Puede ser que cuando comenzaste en tu trabajo, no tuvieras ciertas obligaciones y el trabajo absorbiera todo tiempo. Pero ya no estás en ese punto, ahora prefieres dedicar más tiempo a tu vida familiar y personal: tienes pareja, hijos o, simplemente, ganas de una mayor estabilidad, pero tu trabajo no te lo permite.

¡Es hora de cambiar! Y para reinventarte, qué mejor manera que estudiar una FP a distancia con ILERNA, que te da la oportunidad de seguir conciliando tu vida profesional y personal, mientras estudiar para mejorar tu futuro y apostar por encontrar un trabajo que se adapte a tus necesidades.

Expansión de tu red de contactos

Una de las principales ventajas de estudiar a los 40 es que tienes la oportunidad de hacer networtking. ¿Esto qué significa? Pues la oportunidad de conocer a profesores y compañeros de clase que pueden convertirse en potenciales contactos para el nuevo paso profesional que quieres dar.

Y no solamente eso: también podrás conocer a gente con las mismas inquietudes. Sin duda alguna, volver a clase te ofrece la posibilidad de desarrollar nuevas relaciones, ya sea de compañerismo o amistad, lo que significa dar con personas que comparten tus mismas inquietudes e intereses.

Obtener nuevos conocimientos

Recordar las bases teórico-prácticas de tu campo laboral o aprender nuevas, es subirse al tren de las novedades y las nuevas tecnologías, herramientas que te ayudarán a mejorar tus competencias profesionales y que, por supuestos, alientan a este cambio de vida.

Desarrollo personal

Ante todo, es una gran oportunidad para conseguir alcanzar esos objetivos personales que llevas años y años posponiendo. Se trata de una experiencia enriquecedora que, aparte de que ayuda en plano profesional, también desarrolla la capacidad de descubrir nuevas pasiones y ganar más confianza en ti.

¿Encontrar trabajo después de los 40 es posible?

Por supuesto que sí. Todavía tienes mucho que ofrecer, mucha vida laboral por delante y, sobre todo, la capacidad de darte una nueva oportunidad si, hasta ahora, consideras que nos has alcanzado profesionalmente todo aquello que realmente te apasiona o que puede hacerte más feliz laboralmente.

Por si acaso, ten en cuenta que nunca debes de dejar de buscar empleo. Mantener tu cv actualizado es muy importante, ya que así no dejarás escapar ninguna oportunidad laboral. Y es que cuando están trabajando es más fácil estar en el radar de nuevas vacantes, que si te encuentras bajo la presión del desempleo.

Por otro lado, recuerda que el mercado es cada vez más competitivo, de ahí que se exijan no solo determinadas competencias digitales, sino también polivalencia y motivación para adaptarte a los cambios. Eso sí, siempre teniendo en cuenta tus prioridades.

Además, la experiencia que llevas acumulada no caerá en saco roto. Es un ‘arma’ muy destacable frente a potenciales competidores más jóvenes. Por ello, a la hora de optar a un nuevo puesto, puedes destacar tu cualificación, tu facilidad de adaptación y tu madurez, como grandes bazas que te diferenciarán del resto.

Y, sobre todo, al volver a estudiar a los 40, no dejes de potenciar la formación, como base para reciclar tus conocimientos para que te ayude a mejorar, no solo dentro de tu empresa, sino ante la posibilidad de buscar un nuevo trabajo.

Recuerda que con ILERNA se te abre abanico de posibilidades al poder estudiar un ciclo dentro de ramas como la sanitaria, marketing y comercio, informática y comunicaciones, o servicios socioculturales, entre otros, siendo la modalidad online la más flexible en cuanto a tus horarios, pero también tienes la opción de estudiar presencial o semipresencialmente.