Olimpiadas: hablemos de deporte y salud mental 

Hablar de deporte olímpico es sinónimo de récords, medallas doradas e historias de superación de aquellos que sueñan con alcanzar el podio. Pero todo en la vida, incluso el acontecimiento deportivo más importante del mundo, tiene su cara B. Por eso, hoy hablamos de deporte y salud mental. 

Un ejemplo claro de la importancia de unir deporte y salud mental es Simone Biles, la gimnasta más laureada de la historia. Pese a ser una de las mejores atletas de todos los tiempos, en los Juegos Olímpicos de Tokio se tuvo que retirar de la competición. 

El motivo fue tajante: sus problemas de salud mental la superaron y la mantuvieron alejada del tatami durante dos años. Este retiro sirvió para poner el foco en la importancia de la salud mental en el deporte. 

Salud mental en el deporte: una relación vital 

La salud mental siempre ha sido una asignatura pendiente en el deporte. Pero en los últimos tiempos, se están dando pasos significativos para mejorar esta situación. Así, la formación como preparador físico ya incluye técnicas para ayudar a deportistas a manejar el estrés y la presión. 

Incluso el Comité Olímpico Internacional (COI) ha reconocido la importancia de este tema. De esta forma, ha desarrollado un kit de herramientas de salud mental para apoyar a los atletas y sus equipos.

Este documento desarrolla paso por paso el procedimiento que las organizaciones deportivas deben seguir para que los entornos de los atletas sean seguros. Asimismo, la organización de los Juegos Olímpicos ha habilitado un espacio dedicado a la salud mental dentro de la propia Villa Olímpica.

Factores que afectan a la salud mental en los deportistas 

No es extraño que el COI haya tomado cartas en el asunto porque 1 de cada 3 deportistas de élite tiene problemas de salud mental. 

Este dato refleja que el de Simone Biles, aunque mediático, no es un caso aislado. Son varios los factores que contribuyen a esta situación, que afecta a atletas de diversas disciplinas. 

Presión competitiva

La constante necesidad de rendir al máximo y superar al resto de competidores puede generar altos niveles de estrés y ansiedad. Los deportistas de élite están siempre bajo el escrutinio público, lo que puede llevar a un desgaste mental importante.

Expectativas externas

Las expectativas de entrenadores, familiares, seguidores y patrocinadores pueden ser asfixiantes. Los atletas a menudo sienten que deben cumplir con estándares imposibles. Esto incrementa su estrés y puede afectar de manera muy negativa a su salud mental.

Lesiones

Las lesiones no sólo afectan físicamente a los deportistas, sino que también pueden tener un impacto emocional y psicológico grande. La frustración de no poder competir o el miedo a no recuperar el mismo nivel de rendimiento deportivo pueden contribuir a problemas de salud mental.

Equilibrio entre vida personal y profesional

Mantener un equilibrio entre la vida personal y las exigencias del deporte puede ser muy difícil. Los entrenamientos intensivos y las competiciones frecuentes dejan poco tiempo para la familia, los amigos y el descanso.

Por ejemplo, la nadadora olímpica Mireia Belmonte entrena una media de 7 horas diarias. Es un estilo de vida sacrificado en el que es fácil que aparezcan sentimientos de aislamiento o agotamiento. 

Si eres deportista: Estrategias para mantener la salud mental en el deporte

Si algo hemos aprendido de los deportistas que han revelado sus luchas con la salud mental, es la importancia de no descuidar nuestro bienestar emocional. No basta con entrenar el cuerpo, también debemos cuidar de nuestra mente. Por eso, hay que tener un plan. 

Apoyo psicológico

Contar con el apoyo de profesionales de la salud mental, como psicólogos deportivos, es crucial. Estos especialistas ayudan a los atletas a desarrollar habilidades para manejar el estrés, la ansiedad y otros desafíos emocionales.

Técnicas de relajación

Incorporar técnicas de relajación como la meditación, el yoga y la respiración profunda puede ser muy beneficioso para ganar calidad de vida. Estas prácticas ayudan a reducir el estrés, mejorar la concentración y promover un estado de calma, esencial para el bienestar mental.

Red de apoyo

Tener una red de apoyo sólida, que incluya a familiares, amigos y compañeros de equipo, es vital. Estos vínculos proporcionan un espacio seguro para compartir experiencias y sentimientos, ofreciendo el respaldo emocional necesario en momentos difíciles.

Educación y concienciación

Participar en programas que eduquen a los atletas sobre la importancia de cuidar su salud mental es imprescindible. Al reconocer y detectar las señales de alarma, es más fácil actuar para prevenir un desgaste emocional más grave. No hay que esperar a llegar al límite para actuar. 

Si aún no lo practicas: Beneficios del deporte en la salud mental 

El deporte no sólo es beneficioso para la salud física, sino que también tiene un impacto positivo importante en la salud mental. 

Reducción del estrés y la ansiedad

El ejercicio físico activa el llamado cuarteto de la felicidad, esto es, serotonina, endorfinas, oxitocina y dopamina. Estos neurotransmisores ayudan a reducir el estrés y la ansiedad.

Actividades como correr, nadar o practicar yoga pueden ser muy efectivas para calmar la mente y aliviar la tensión acumulada.

Mejora del estado de ánimo

El deporte también puede ser una herramienta poderosa para mejorar el estado de ánimo. La actividad física regular ha demostrado ser efectiva en la reducción de síntomas de depresión y en la mejora general del bienestar emocional.

La sensación de logro que viene con alcanzar metas deportivas también contribuye a una mejor autoestima y autoconfianza.

Mejora del sueño

Practicar deporte también contribuye a mejorar la calidad del sueño. No infravalores la importancia de un buen descanso. Dormir bien te ayuda a regular el estado de ánimo, mejorar la concentración y, sobre todo, disminuir la fatiga mental. 

Incremento de la energía y la vitalidad

La actividad física aumenta los niveles de energía y reduce la fatiga, promoviendo una mayor vitalidad. Sentirse físicamente activo y enérgico puede tener un efecto positivo en la motivación y la productividad en otras áreas de la vida.

Mens sana in corpore sano 

Como reza la expresión latina, es vital encontrar un equilibrio entre el cuerpo y la mente. Simone Biles es un ejemplo que nos recuerda que deporte y salud mental deberían ir siempre de la mano. No hay mayor medalla de oro que gozar de bienestar emocional.