La anemia: qué es y qué tipos hay

La anemia, una sombra silenciosa que debilita nuestros cuerpos, afecta ya a 1.920 millones de personas en todo el mundo. Pero, ¿qué es la anemia en realidad y cómo podemos deshacernos de ella? 

En las últimas tres décadas, el número de casos de esta enfermedad ha aumentado en 420 millones. Esto implica que una cuarta parte de la población mundial sufre anemia. Este fenómeno, revelado por la revista científica The Lancet, nos muestra una epidemia invisible que debilita a muchas personas sin hacer mucho ruido. 

Pero no todo son malas noticias. Como ya te habrán repetido en casa muchas veces, somos lo que comemos. Así, nuestra dieta tiene mucho que ver con la prevalencia de la anemia. Lo positivo es que está en nuestra mano cambiarlo. 

Si quieres ayudar a personas con anemia a mejorar a través de la alimentación, puedes formarte como Técnico Superior en Dietética. Pero para abordarla de manera correcta, primero debes conocer qué es la anemia y qué tipos hay.

¿Qué es la anemia?

La anemia es una condición en la cual el cuerpo no produce suficientes glóbulos rojos sanos para transportar el oxígeno a los tejidos. Esta deficiencia puede tener diversas causas, pero las más comunes incluyen una falta de hierro, vitamina B12 o ácido fólico en la dieta. 

Los síntomas de esta condición médica suelen ser sutiles al principio, como fatiga, dolor de cabeza y debilidad. Pero, con el paso del tiempo pueden evolucionar a otros más graves como mareos, palpitaciones y dificultad para respirar. 

Tipos de anemia 

Lo más habitual es que asociemos la anemia con la falta de hierro en el organismo, pero no siempre es así. Existen distintos tipos en función de las causas que la provocan. 

Ferropénica

Es el tipo más común y, como hemos comentado, se produce por una falta o deficiencia de hierro. La falta de energía, la piel pálida y los problemas en el sistema inmunitario son los síntomas más frecuentes. 

Este tipo es más habitual en las mujeres en edad fértil, como consecuencia de la pérdida de sangre durante la menstruación.

Megaloblástica

Este tipo de anemia se caracteriza por la presencia de glóbulos rojos demasiado grandes y es causada por deficiencias de vitamina B12 y ácido fólico. 

Los síntomas pueden incluir debilidad, fatiga, dificultad para concentrarse, y problemas neurológicos como hormigueo en las manos y pies. 

Anemia por deficiencia de ácido fólico (vitamina B9)

Este tipo es similar al anterior. Pero, en este caso, se debe a la falta de ácido fólico. Esta vitamina es vital para la producción y la maduración de los glóbulos rojos.

Los síntomas son similares a los de las demás e incluyen fatiga, debilidad, irritabilidad y dificultad para concentrarse.

¿Cuáles son los valores normales de hemoglobina en sangre?

La hemoglobina es una proteína crucial en los glóbulos rojos, ya que transporta el oxígeno desde los pulmones hasta los tejidos del cuerpo. Además, devuelve el dióxido de carbono de los tejidos a los pulmones. 

Pero, no existe un único valor que se considere normal. Esto depende de la edad, el género o el estilo de vida de la persona. Sin embargo, los valores de referencia son: 

• Niños entre 5 y 12 años: 11,5 g/dL
• Adolescentes (12 a 16 años): 12 g/dL
• Hombres adultos: 13,8 y 17,2 g/dL
• Mujer adulta: 12,1 y 15,1 g/dL
• Mujer en estado (embarazada): a partir de 11 g/dL.

¿Qué es bueno para la anemia?

Combatir esta condición de salud de manera efectiva implica cambios en la dieta para adoptar un estilo de vida más saludable. Tener en cuenta estos consejos te ayudará a combatir los síntomas de esta condición médica: 

• Alimentos ricos en hierro: carnes rojas, mariscos, legumbres y frutos secos.
• Alimentos ricos en vitamina B12 y ácido fólico: carnes, pescados, huevos, productos lácteos. Además de frutas cítricas y verduras de hoja verde. 
• Evita sustancias que te impiden absorber el hierro: como té y café. 

Ante cualquier duda sobre los resultados de un análisis de sangre, consúltalo con tu médico de cabecera o con tu dietista. Antes de preocuparte, debes saber que puede haber muchas variables que influyan en tus resultados.

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